Reglas para Situaciones de Manejo Peligrosas: Minimizar Riesgos de Conducción
Updated 14 de Enero de 2021Como conductor con frecuencia te encontrarás con situaciones en las que estarás expuesto a un nivel de riesgo mayor al habitual. Esto puede ser por otros usuarios de carretera, las condiciones del camino, mal tiempo o todas las anteriores. Sin importar si este aumento del riesgo es menor o significativo, tendrás que ajustar tu comportamiento de manejo para mantenerte seguro a ti y a los demás usuarios de carretera.
Más adelante en este curso exploraremos estas situaciones de conducción peligrosas y te enseñaremos a manejar los riesgos que presentan. Aquí, te proporcionamos una introducción básica para todos estos temas y discutimos algunas de las reglas de manejo seguro que debes obedecer. Comencemos con los peligros de la conducción en carreteras.
Riesgos de conducir en autopistas
Las carreteras de alta velocidad con múltiples carriles pueden denominarse autopistas, “freeways”, “expressways”, carreteras con peajes, “turnpikes” o carreteras de acceso limitado. Estas arterias viales permiten que los conductores viajen a diferentes comunidades, ciudades y estados de manera rápida y con relativa facilidad. Nuestro sistema de transporte por carreteras no podría sobrevivir sin este tipo de camino.
Los automovilistas pueden viajar más rápido en las autopistas, ya que el acceso a estas carreteras desde los caminos secundarios de conexión es limitado. Los conductores pueden entrar a una “expressway” solo en los intercambios designados. Sin tener que lidiar con las intersecciones convencionales, los conductores que utilizan una carretera de acceso limitado pueden continuar viajando a gran velocidad mientras otros conductores entran y salen.
En muchos sentidos, las autopistas están entre las carreteras más seguras en Estados Unidos. Desafortunadamente, la “alta velocidad” equivale a un “alto riesgo”. A pesar de todo lo que se ha hecho para proteger a los automovilistas que usan estas carreteras, viajar a alta velocidad aumenta ciertos peligros. Por ejemplo, conducir a alta velocidad hará que:
- Detectar peligros potenciales sea más difícil
- Se incremente el tiempo que tarda un conductor en detenerse y la distancia recorrida en ese tiempo
- Aumente la gravedad de colisiones o accidentes
El peligro de transitar carreteras de alta velocidad y acceso limitado es más elevado por el hecho de que los vehículos generalmente hacen un “sándwich” entre los carriles de tráfico en movimiento. Si algo sale mal, puede que no tengas espacio para evitar una colisión.
Reglas de manejo seguro en autopistas
Planificar tu viaje de antemano es una de las mejores formas de asegurar que tu tránsito por la autopista transcurra sin problemas. Si sabes exactamente adónde vas y cuándo debes salir, podrás enfocarte en el control del vehículo, monitorear tu velocidad y analizar la carretera en busca de peligros. También debes saber el procedimiento correcto para entrar y salir de las autopistas, cómo evitar la “hipnosis de carretera” y otras prácticas de conducción para carreteras de alto riesgo.
Entrar a una autopista
Los conductores que ingresan a una autopista están obligados legalmente a ceder el derecho de paso a los vehículos que ya se encuentran en la autopista. Debes usar el carril de aceleración para igualar la velocidad del tráfico existente en la carretera, incorporándote a la autopista solo cuando haya un espacio seguro entre los automóviles.
Elegir un carril en una autopista
Los automovilistas deben elegir en cuál carril de la autopista deben conducir dependiendo de qué tan rápido pretenden viajar. El tráfico más rápido debe ocupar el carril izquierdo y el tráfico más lento debe ocupar el carril derecho. La mayoría del tiempo es más seguro evitar el carril derecho a menos que debas conducir mucho más lento que el resto del tráfico o debas entrar o salir de la autopista.
Cuando sea posible, incorpórate al carril central para dejar espacio para los nuevos vehículos que entran a la autopista por el carril derecho. Si otro vehículo viene detrás de ti rápido o muy cerca de la parte trasera de automóvil, incorpórate a la derecha para que te rebase. Si no es seguro incorporarte a la derecha, debes mantener el rumbo y la velocidad. No aceleres.
Salir de una autopista
Cuando salgas de una carretera de acceso limitado, nada será más importante que prepararlo con tiempo. Nunca cruces múltiples carriles en una sola maniobra. En vez de eso, asegúrate de conocer cuál es tu salida y busca señales de guía que te indiquen cuando te aproximas. De esa manera, podrás incorporarte gradualmente al carril de salida apropiado sin ponerte en peligro a ti ni a otros usuarios de carretera.
Siempre presta atención a las señales de límites de velocidad sugeridos y obligatorios en las rampas de salida de las autopistas. Para cuando llegues al final de la rampa debes haber reducido la velocidad lo suficiente para incorporarte de forma segura al tráfico de la nueva carretera.
Evitar la hipnosis de carretera
La hipnosis de carretera, también llamada hipnosis de autopista o fiebre de la línea blanca puede ocurrir en autopistas de acceso limitado largas, rectas y de alta velocidad con pocos paisajes y distracciones. En estas carreteras, la monotonía de la experiencia de conducción puede causar que tu mente divague o se adormezca. La hipnosis de autopista es increíblemente peligrosa, ya que puede hacer que no detectes y evites peligros.
Protégete de la hipnosis de carretera con estos consejos:
- Maneja menos de 8 horas por día. Si debes conducir más que eso, toma descansos más frecuentes y largos.
- Toma un descanso al menos cada dos horas o cada 100 millas. Sal del auto y estira las piernas.
- Analiza la carretera manteniendo la mirada en movimiento. No veas fijamente un solo lugar en la carretera.
Otras reglas de manejo seguro en autopistas
Finalmente, ten en cuenta las siguientes consideraciones de seguridad:
- Evita los puntos ciegos de otros vehículos. Puede que debas pasar a través de ellos a la hora de rebasar pero no te demores demasiado.
- Si el clima lo permite, deja la ventana abierta parcialmente para sentir el aire fresco y mantenerte alerta.
- No uses teléfonos celulares u otros tipos de dispositivos de comunicación inalámbrica cuando viajes a gran velocidad. Tan solo un lapso momentáneo de concentración puede llegar a ser mortal.
Conducir de noche
Manejar de noche es siempre más peligroso que hacerlo durante el día, incluso en tramos de la carretera bien iluminados y seguros. Además de experimentar visibilidad limitada, conducir de noche significa que es posible fatigarte y compartir el camino con otros conductores cansados. Es mejor evitar la conducción nocturna cuando sea posible, pero si no puedes estas son las reglas que debes considerar:
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¡Activa esas luces delanteras!
Mantener encendidas las luces cuando conduces a toda hora entre el atardecer y el amanecer es un requisito legal en todos los estados. Debes consultar las reglas para conducir de noche en tu manual de manejo, ya que es posible que haya otras reglas específicas del estado que debas conocer. Por ejemplo, en Texas: los conductores deben mantener sus luces encendidas no más de 30 minutos después del atardecer hasta 30 minutos antes del amanecer o en cualquier otro momento donde la visibilidad es limitada a menos 1000 pies debido a otras condiciones. - 2
Mantén tus luces de corto alcance encendidas cerca de otros vehículos.
Las luces de alto alcance o luces de carretera son lo suficientemente potentes para cegar a otros conductores o peatones y provocar un accidente. Las reglas sobre el uso de luces de carretera están definidas en la mayoría de las leyes de tránsito a nivel estatal. Por ejemplo, en Pennsylvania: los conductores no deben tener las luces de alto alcance encendidas a menos de 500 pies de un vehículo que se aproxima o 300 pies de un vehículo al que están siguiendo. - 3
No mires directamente las luces delanteras de otro vehículo.
Incluso cuando otros conductores tengan encendidas las luces de corto alcance, el deslumbramiento causado por ver directamente a la luz puede provocar ceguera temporal. Si un vehículo que se acerca no desactiva las luces de carretera, desvía la mirada hacia las marcas del carril del lado derecho de la carretera hasta que haya pasado. - 4
Deja tus luces encendidas cuando te detengas en una carretera oscura.
En caso de una avería del vehículo, fatiga u otra situación que requiera parar en una carretera con poca iluminación de noche, siempre mantén activas las luces de estacionamiento, las luces de cruce y las luces de emergencia para advertir a otros usuarios de carretera acerca de tu presencia.
Conducción en invierno
Los riesgos que los conductores enfrentan al conducir en un clima invernal son significativos y complejos. El agua, la nieve y el hielo en la superficie de la carretera reducen la tracción y hacen que tu vehículo responda menos a la hora de frenar. La lluvia y la nieve que caen también pueden hacer mucho más difícil ver el camino adelante y detectar los peligros que se aproximan con tiempo para reaccionar.
Siempre debes tener mucha precaución al conducir en carreteras cubiertas por nieve o hielo. Reduce tu velocidad y deja el mayor espacio posible alrededor de tu vehículo, ya que es posible que detenerse pueda tomar más tiempo del habitual. Estas reglas de manejo seguro te ayudarán a evitar problemas al conducir en clima invernal:
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Considera equipar tu vehículo con llantas o cadenas para la nieve.
Toma en cuenta que el uso de cadenas para nieve es restringido en muchos estados debido a que pueden causar daño en la superficie de la carretera. Tu manual de manejo del estado te explicará estas restricciones si aplican para tu área. - 2
Evita conducir sobre lugares con sombras cuando sea posible.
El hielo y la nieve de la carretera se derriten más lentamente bajo la sombra, por lo cual estas áreas son más resbaladizas que otras partes del camino. - 3
Ten cuidado con el hielo negro.
Las capas finas de hielo son prácticamente imposibles de ver para los conductores. En clima de invierno, mantener la velocidad al mínimo es imprescindible. - 4
Mantén tus ventanas limpias.
Las ventajas sucias limitarán tu visibilidad en la carretera. También debes limpiar tu vehículo de toda la nieve y el hielo antes de manejar, ya que es un requisito legan en la mayoría de los estados. Abre las ventanas si se empañan mientras conduces.
Emergencias y fallas
Todos los conductores deben lidiar con emergencias inesperadas o fallas del vehículo tarde o temprano. Puedes controlar tus propias acciones pero no las acciones de los conductores a tu alrededor e incluso los automóviles nuevos y con buen mantenimiento ocasionalmente sufren averías sin previo aviso. Debes estar listo para todo, ya que tu vida puede depender de ello.
La regla número uno que debes seguir en cualquier emergencia es: no entrar en pánico. Los conductores que reaccionan con pánico a un peligro inesperado suelen empeorar la situación. Siempre tómate un momento para pensar y reaccionar de manera considerada.
Corregir un derrape
Los derrapes ocurren cuando una o más de tus llantas pierde el agarre con la superficie de la carretera. Cuando tu automóvil empieza a patinar, corrige el derrape al:
- Mover el volante en la misma dirección del derrape.
- Quitar el pie del acelerador. Pisar los frenos puede empeorar el derrape.
Salirse de la carretera
Las llantas pueden abandonar el pavimento si te mueves demasiado a la derecha al evitar un peligro o un conductor descontrolado. Esto también puede suceder si un conductor somnoliento pierde la concentración y se sale del carril. El cambio inmediato en la textura de la superficie debajo de las ruedas puede sorprenderte, especialmente si hay una diferencia entre el nivel de la carretera y el hombro de la carretera. Si una o dos de las llantas abandonan el pavimento:
- No quieras volver rápidamente a la carretera, ya que esto puede causar que tu vehículo gira fuera de control.
- Reduce la velocidad quitando tu pie del acelerador. Evita frenar bruscamente.
- Una vez que hayas alcanzado una velocidad segura, regresa a la carretera con cuidado. Asegúrate de que haya suficiente espacio en el tráfico.
Manejar una falla en los frenos
La falla de los frenos es aterradora pero no debería ser un evento catastrófico si se maneja correctamente. Si los frenos fallan, disminuye la velocidad al quitar el pie del acelerador y cambiando a una marcha más baja. Cuando hayas reducido la velocidad considerablemente, puedes activar el freno de mano para detener por completo el vehículo. Evita hacer eso demasiado pronto, ya que puede hacer que el vehículo derrape.
Recuperarse de una llanta desinflada o estallada
Comparado con otros tipos de fallas mecánicas, perder una llanta al conducir es relativamente común. Cuidar tus ruedas y mantenerlas correctamente infladas minimizará el riesgo de que estallen. Toma en cuenta que el riesgo de una falla de las llantas aumenta en climas de extremo calor y carreteras en mal estado.
Si tus ruedas se revientan, trata de mantener la calma. Reduce la velocidad quitando el pie del acelerador y conduce tu vehículo hacia el costado de la carretera u otro lugar seguro para detenerte.
Alejar el vehículo de la carretera
Cuando experimentes una falla eléctrica o mecánica que haga imposible o extremadamente difícil seguir manejando de forma segura, debes detener tu vehículo en el costado de la carretera. Si no puedes resolver el problema, no debes continuar conduciendo el automóvil.
Tu vehículo representa un peligro para otros conductores cuando está estacionado en el hombro de la carretera o en el costado del camino. Para mantenerte seguro, debes hacerte lo más visible posible para el tráfico:
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Activa las luces de emergencia o las luces traseras en caso de que las luces de emergencia no funcionan. Al detenerte de noche también debes encender las luces interiores del automóvil.
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Coloca un paño blanco o de colores brillantes en la antena o la puerta de tu auto donde otros conductores puedan verlo. Esto indica que estás teniendo problemas y buscas ayuda.
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Pon bengalas, conos u otro dispositivo de advertencia alrededor de tu vehículo si no puedes alejarlo de la carretera. Todos los ocupantes deben dejar el vehículo y esperar la asistencia al costado del camino.
Riesgos de conducir en colinas
Al conducir en una colina empinada, debes contrarrestar el efecto de la gravedad que actúa sobre tu vehículo. Esta fuerza puede hacer que aceleres o pierdas el control al conducir cuesta abajo en una colina empinada. Para evitarlo, mantén tu vehículo en una marcha baja y coloca el pie sobre el pedal del freno. Esto debería evitar una aceleración excesiva y facilitar el frenado si necesitas reducir la velocidad.
Los conductores deben tomar en cuenta que ir cuesta abajo en neutro o sin marcha puesta es ilegal en casi todos los estados, ya que es increíblemente peligroso.